Vivimos de soñar que el sueño se hace realidad sin despertar y el miedo a fracasar quedo tres puertos más allá de tu ciudad

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Libertad de expresión.

La primera noche
ellos se acercan y cogen una flor
de nuestro jardín, 
y no decimos nada. 

La segunda noche 
ya no se esconden 
pisan las flores, 
matan nuestro perro 
y no decimos nada. 

Hasta que un día 
el más frágil de ellos 
entra sólo en nuestra casa, 
nos roba la luna, y 
conociendo nuestro miedo 
nos arranca la voz de la garganta. 

Y porque no dijimos nada 
ya no podemos decir nada 


Vladimir Maiakovsky

No hay comentarios: